<h1>La Telepatía</h1>

CARTAS ZENER

La telepatía es un poder que te permite mediante el pensamiento comunicarte con otras personas, sin necesidad de utilizar ninguno de los 5 sentidos. La telepatía es considerada una percepción extrasensorial y está ligada con los fenómenos paranormales. La telepatía ha sido motivo de infinidad de estudios, a pesar que existen muchos registros la comunidad científica no acaba por aprobarla como cierta o real.

Prueba este juego telepático tanto para hombres como mujeres. ¡Funciona, atrévete!!! Estos son los pasos a seguir:

1. Colócate atrás de esta persona

2. Luego concéntrate con los ojos centrados y fijos en su nuca, pensado que de vuelta su rostro para mirarte.

3. Cuando logres que te mire, directamente, visualiza en tu mente como una película, que esa persona se dirige directamente hacia ti, y te saluda.

4. Espera al primer movimiento que haga con su cuerpo. Después de que te observa o se da vuelta a mirarte, le sonríes amigablemente, con mirada inocente y dulce mientras visualizas: el objetivo es que se acerque a ti.

5. Si no se acerca hacia a ti automáticamente, como lo habías proyectado en tu mente, imagina que estás tomando o comiendo con él o ella algo que te guste mucho, por ejemplo, para mí sería tomando una bebida espumante o comiendo una torta de Mouse de chocolote o de fresas. El instinto placentero y la mente telepática funcionan muy compatiblemente.

6. Por último, si esa persona te agrada mucho y la deseas, imagina que la besas en forma apasionada. EL AMOR NUNCA FALLA.

Seguramente tendrás una respuesta inmediata a tu deseo antes inalcanzable. Prepárate para una nueva cita con esa persona, no dudes que ella vendrá hacia ti. En el amor como en el sexo lo importante es estar abierto a la magia que se presenta en forma cotidiana. El secreto es que tienes el poder para ir más allá de todo lo que crees conocer, y descubrir por ti mismo tu verdadera y profunda percepción de aquello que llamamos la realidad.

ADVERTENCIA NECESARIA: No utilicéis nunca este sistema para intentar obligar a nadie, ni asustar ni coaccionar. Creedme, finalmente los perjudicados acabareis siendo vosotros. Sólo debe ser usado para razonar o explicar sin perturbar la libertad de elección de ninguna persona. O sea que si Manolita no quiere saber nada de nosotros porque está enamorada de Pepito (y nosotros no somos Pepito), lo mejor que podremos hacer en la vida es respetar el libre albedrío ajeno. No es un consejo gratuito: al final los verdaderamente perjudicados seremos nosotros.